Déjame adivinar el baño de tus sueños: con mucho espacio, una inmensa bañadera en el centro y ventanas por las que entra a raudales la luz natural ¡Muy fácil de adivinar! Sin embargo seguro te ha tocado conformarte con un baño pequeño y con escasa iluminación.
A todos nos ha pasado algo similar, si no ha sido el baño entonces es la cocina la que es minúscula, pero este no es motivo para desanimarse sino para buscar inspiración. Por suerte para ti en este artículo te contamos todo lo que necesitas saber sobre la decoración de baños pequeños.
Distribución del espacio
La distribución del espacio es clave para cualquier tipo de baño, pero en uno pequeño más. Esto determinará el espacio restante para el tránsito, el mobiliario, los accesorios, etc. Veamos algunas de las pautas que podemos seguir para elegir la mejor distribución.
Si tiene una forma rectangular alargada como suele suceder en la mayoría de los baños pequeños, entonces la opción más recomendada es la de organizar todos los muebles en línea contra una pared.
En los baños que poseen una forma cuadrada se puede optar por dos variantes fundamentales: una distribución en U o con el aseo y la bañera en perpendicular.
Cualquiera que sea la distribución que se elija es importante garantizar que quede algo de espacio libre frente al lavabo y el inodoro, así no será necesario hacer malabares para asearse.
Ducha en sustitución de la bañera
Una ducha compacta gana mucho más espacio en horizontal que lo que dejaría libre una bañera. A los que consideran que solo con una bañera pueden lograr un baño verdaderamente relajante, les decimos que para nada esto es cierto. Hoy es posible encontrar duchas espectaculares con asientos y columnas de hidromasaje o chorros que resultan muy estimulantes. Las mamparas de cristal o transparentes son otra forma de apostar por la amplitud en esta zona.
Accesorios mínimos
Cuando hay escases de metros siempre hay que hacer sacrificios y en los baños pequeños se trata de los accesorios. Demasiados accesorios pueden recargar el ambiente de manera visual y estos aportan muy poca funcionalidad con respecto a otras piezas. Por tanto debes minimizar todo lo que puedas el número de alfombras, espejos y objetos decorativos.
Muebles y espacios de almacenamiento
De los muebles no podemos prescindir, ya que aunque limitemos el número de accesorios del baño aún necesitamos almacenar los productos de higiene, toallas y demás. Además los espacios de almacenamiento cobran especial importancia en los baños pequeños, para intentar mantener la mayor cantidad de elementos fuera de la vista y la sensación de orden que es fundamental para la espacialidad.
Ahora sí, hay elementos que debemos considerar para elegir los muebles de este tipo de baños. Debemos favorecer los diseños que no sean demasiado voluminosos o profundos, además de evitar los que vayan apoyados al suelo. En este sentido resultan ideales los armarios empotrados con puertas de correderas, los muebles suspendidos y los que aprovechan todo el espacio vertical.
Revestimientos y colores
Los colores que se eligen para las paredes y los revestimientos hacen una gran diferencia en un baño pequeño. Los tonos neutros son siempre los más recomendados o en su defecto las tonalidades pasteles más suaves.
Para favorecer la continuidad espacial del baño que siempre genera mayor amplitud, es muy recomendable elegir un diseño monocromático para paredes y suelos, incluyendo los revestimientos. Luego es posible introducir pequeños matices de colores que animen el espacio.
En cuanto a los revestimientos, las piezas grandes de azulejos, granito o mármol, con apenas juntas visibles, son las más recomendadas para favorecer la amplitud. No hace falta revestir las paredes hasta el techo, ya que en un baño pequeño esto puede resultar demasiado agobiante. Es más aconsejable vestir completamente las zonas húmedas y dejar el resto a media altura.